Desde fuera todo se ve bien: tienes trabajo, tienes salud, tienes personas cerca. Incluso haces cosas que se supone que deberías disfrutar.
Pero dentro de ti, hay una sensación rara que no sabes explicar.
No estás mal del todo, pero tampoco estás bien.
No hay un motivo concreto, pero algo te falta.
¿Te suena?
Es más común de lo que crees. Pero como no hay un problema “claro”, solemos ignorarlo… hasta que se acumula.
Hoy vamos a normalizar esa sensación, ayudarte a identificar qué te falta exactamente y darte acciones concretas para empezar a cambiarlo.
🔍 Lo primero: ¿Por qué me siento así si “todo está bien”?
La respuesta corta: porque “todo” no está tan bien como parece.
La vida no solo va de tener cubiertos los básicos (trabajo, casa, salud, familia).
También necesitas conexión interna, propósito, descanso real, placer, relaciones auténticas…
Si no tienes todo eso (o parte), tu cuerpo y tu mente te lo hacen saber.
Estas son algunas señales:
- Sientes que “todo está bien”, pero tú estás vacía o apagada
- No sabes qué te ilusiona o motiva últimamente
- Te cuesta disfrutar lo cotidiano
- Estás irritable o con cambios de humor sin razón clara
- Te distraes con cosas (redes, tareas, comida…) para no estar contigo
- Sientes culpa por sentirte así
👉 Esto no es debilidad. Es una señal de que necesitas reconectar contigo.
🧭 ¿Qué te está faltando exactamente?
Aquí van áreas muy concretas que puedes revisar una a una. Léelas con calma y pregúntate:
¿Esto lo tengo cubierto en mi vida o lo tengo olvidado?
1. Tiempo real para ti (no solo ratitos sueltos)
¿Cuánto rato al día estás realmente contigo, sin distracciones, sin prisa?
No hablamos de “ver Netflix sola” o “tomarte un café rápido”.
Hablamos de tiempo de calidad contigo, aunque sean 20 minutos al día.
💡 Empieza por aquí:
- Elige un momento fijo al día para hacer algo solo para ti (leer, escribir, estirarte, pensar, mirar por la ventana, hacer nada)
- Que no sea en el móvil. Que no sea para producir. Solo ser.

2. Espacios donde expresar cómo te sientes (sin juicio)
¿Tienes con quién hablar de lo que realmente sientes, sin miedo a parecer débil?
Si no, acumulas. Y eso te desconecta.
💡 Empieza por aquí:
- Escribe cada noche 3 frases sobre cómo te has sentido ese día
- O grábate audios contándotelo a ti misma
- Si tienes alguien de confianza, empieza a compartirlo sin vergüenza
3. Conexión con algo que te inspire o te dé sentido
¿Hay algo en tu vida que te dé ilusión real?
Puede ser un proyecto, un hobby, una causa, aprender algo nuevo.
Sin eso, te sientes como si vivieras solo por inercia.
💡 Empieza por aquí:
- Escribe una lista de cosas que te ilusionaban antes
- Elige una (aunque sea muy pequeña) y vuelve a incluirla en tu semana
- Si no se te ocurre nada, empieza a probar cosas nuevas: voluntariado, arte, formación, escritura, clases de algo, lo que sea
4. Cuidar tu cuerpo (más allá de la estética)
¿Cómo estás tratando tu cuerpo estos días?
Cansancio crónico, dolor de cabeza, inflamación, tensión… pueden ser señales de que tu cuerpo no se siente bien cuidado.
💡 Empieza por aquí:
- Duerme mínimo 7h (y si no puedes, revisa por qué)
- Bebe más agua (sí, suena simple, pero lo olvidamos)
- Come al menos una comida al día sentada, sin pantalla, sin prisa
- Muévete al menos 10-15 minutos diarios: caminar, estiramientos, bailar, lo que sea

5. Tener espacios de silencio (de verdad)
¿Cuándo fue la última vez que estuviste en silencio total 10 minutos?
Vivimos tan llenas de ruido externo que ya no escuchamos lo que sentimos.
💡 Empieza por aquí:
- Antes de dormir, apaga el móvil y quédate en silencio 5-10 minutos
- Escucha tu respiración, tus pensamientos, tus tensiones
- No intentes cambiar nada, solo observa
✅ ¿Y ahora qué? Pasos concretos para empezar a sentirte mejor
- Detecta en qué área estás más desconectada (puedes usar las 5 de arriba como guía)
- Elige una sola acción pequeña para aplicar esta semana
- Añádela en tu agenda o tu tracker de hábitos (si no, no pasará)
- Sé constante, no perfecta: no hace falta hacerlo todo todos los días. Pero sí repetirlo lo suficiente para que tu cuerpo lo sienta como cuidado.
- Evalúa cada semana cómo te sientes: ¿qué ha cambiado?, ¿qué necesitas ajustar?
🧠 Importante: si no haces cambios, esto no cambia solo
No esperes a que se “pase solo”. Esta sensación se alarga cuando no hacemos nada al respecto.
Empieza hoy. Da un paso. Y si necesitas guía para reconectar contigo, este artículo te puede ayudar mucho:
👉 Cómo empezar a reconectar contigo misma cuando te sientes apagada
Lo que sientes es real, aunque no tenga nombre concreto.
Y no necesitas que algo esté mal fuera para darte permiso a cuidarte dentro.
Estás a tiempo de volver a ti. Solo tienes que darte prioridad.

